Dios, el Universo, o como quieras llamarlo, recibe los sueños y deseos de nuestro corazón y nuestra mente, cuando vibramos tan sólo al pensar en ellos. Esos sueños pueden ser de gozo si se realizan, pero es necesario tener claro que depende de cuánto trabajemos por ellos, además de la fe y la paciencia que tengamos.
Proverbios 4:23 dice: Ante todo, cuida tus pensamientos porque ellos controlan tu vida.
La paciencia nos ayuda a tomar buenas decisiones, con lo cual es probable que favorezcamos el cumplimiento de esos sueños. Considera que nuestros tiempos, no son los mismos tiempos de Dios: si quieres ver a Dios reír, cuéntale tus planes. La desesperación puede llevarnos por falsos atajos y alejarnos de nuestra meta.
Proverbios 16:9 dice: Uno puede planear su vida, pero Dios decide lo que a uno le va a suceder.
Si tenemos el deseo de cumplir nuestros sueños, tomemos en cuenta que tal vez debamos pasar por un proceso que puede ser largo, que tal vez no se logre de inmediato e incluso se pierda de nuestra vista. Armémonos con paciencia y trabajo, pero sobre todo, con verdadera fe, tomando en cuenta a Dios en todo momento, con la certeza de que hará lo mejor para nosotros.
Proverbios 16:3 dice: Pon en manos Dios todo lo que haces, para que tus planes se hagan realidad.
Podemos apoyarnos en la teología y la psicología, porque son ciencias que estudian al ser humano desde el punto de vista anímico, emocional o espiritual. Además, la fe tiene una influencia directa en nuestro modo de vivir, porque nos ayuda a ser positivos, en especial para mantener vivos nuestros sueños frente a las circunstancias.
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Meza Torres, F. E., (8 de enero de 2021). Cumplir nuestros sueños. Obtenido de Selecta Magazine:
https://franmt7.com/2021/01/08/cumplir-nuestros-suenos
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